En The Rational Optimist: How Prosperity Evolves, Matt Ridley argumenta que la humanidad ha progresado de manera constante y que el futuro es brillante gracias a la evolución de la cooperación, el comercio y la innovación. A través de un enfoque histórico y económico, Ridley sostiene que, a pesar de los desafíos que enfrentamos, la humanidad ha mejorado significativamente en términos de salud, bienestar y calidad de vida. El autor subraya que el intercambio de ideas y la colaboración entre individuos y culturas son las principales fuerzas detrás de este progreso continuo.

Uno de los puntos centrales del libro es la idea de que el comercio y el intercambio no solo de bienes, sino también de conocimientos, ha sido el motor de la prosperidad. Ridley explica cómo, a lo largo de la historia, las sociedades que han promovido el comercio y la innovación han logrado mejorar sus niveles de vida de manera exponencial. También critica el pesimismo generalizado sobre el futuro, mostrando cómo, a pesar de las advertencias constantes sobre el agotamiento de recursos, la tecnología y la creatividad humana han encontrado soluciones a muchos de los problemas que enfrentamos.

Ridley se describe como un "optimista racional", argumentando que aunque no estamos libres de problemas, la tendencia a largo plazo es hacia la mejora, impulsada por la libertad económica, la globalización y el progreso tecnológico. A lo largo del libro, desafía las ideas pesimistas sobre el colapso inevitable de la civilización, sugiriendo que la innovación y el comercio seguirán siendo clave para un futuro mejor.